Capitulo 5:Canadá

Estamos en el aeropuerto. A pesar de que Eric ha tratado de tranquilizarme diciendo que no dejara que nada me pase, sigo teniendo miedo de lo que pueda ocurrir...

-¡Hey!- Exclamo Cristina.

-¿Qué ocurre?.-

-¿Cómo pretendes subirnos a un avión sin documentos?.- Esa es la pregunta que yo también me hago.

-Tengo todo bajo control.-

Eric busco los pasajes en su billetera y nos subimos al avión... Cuando nos pidieron los pasaportes, él nos guiño el ojo, tomo un fardo de billetes del bolsillo de su chaqueta y se lo entrego a la chica encargada.

-Les dije que todo estaba bajo control.-

-No puedo creer que lo corrupto que es el mundo.- Dijo Cristina burlándose.

-¿Tus amigos saben... sobre mi? Es decir... no podemos llegar como prófugos a pedirles ayuda.-

-Ellos están al tanto de esto. En realidad, todos los seres como nosotros están al tanto de ti.- No lo puedo creer. Como una simple mortal, nadie sabía de mi existencia, a lo más mi familia y mis amigos. Y ahora... ¡¡Todos lo seres extraordinarios saben que existo!!

-Eres muy famosa, Miranda.-

-Jajajajajajajajajaja.-

...

Acabamos de bajar del avión. Eric va por nuestro equipaje, mientras nosotras vamos a comer algo a la cafetería del aeropuerto.

-Aquí están sus maletas.-

-Gracias.- Respondí mientras bebía un sorbo de mi gaseosa.

-De nada.-

-Mmmmm.-

-¿Qué pasa Miranda?.-

-Eric... Pues tu eres vampiro... ¿No deberías de... comer? o algo así.- Se me llega a revolver el estomago de solo pensar que... vive de sangre... humana...

-Si...-

-¡¡Hey chicos!!.- Una mujer de cabello negro nos llamaba.

-¡¡Anne!!.- Dijo Eric.

-Hola Eric.- La chica ''Anne'' saludo  a Eric con un abrazo y un beso en la mejilla. Luego se acerco a Cristina.

-Hola Cristina, tanto tiempo.- Lo dijo con un tono cordial.

-Hola Anne, lo mismo digo.- Después se acerco a mí.

-Tu debes ser la princesa Miranda. Es un placer conocerte.-

-Hola.- No quise responder de forma cortante, pero no supe que más decir.

-¡¡Eric!! Viejo amigo.- Dijo un hombre que llego al lado de Anne.

-¡¡Andrew Salvatore!!.- Se dieron un fuerte abrazo.

-Tanto tiempo.-

-Si.-

-Tu debes ser la princesa Miranda.- Me dijo Andrew, me tomo la mano y la beso. -Es un placer conocerte.- Anne carraspeo.

-Querida Cristina.- Le dio un abrazo.

-Andrew, que bueno volver a verte.-

-Buenos, ellos son mis viejos amigos, Anne y Andrew.- Definitivamente las presentaciones están de  más, pero creo que para Eric sigue siendo importante.

Andrew  y Anne nos llevaron a su su casa, más bien, a su mansión.

-Acompáñame Miranda, te mostraré tu habitación.- Me dijo Anne tomándome de la mano.

-Ok.- La seguí.

Entramos a una habitación enorme pintada verde claro, tenía una gran ventana  que daba a el patio principal...

-¿Te gusta?.- Pregunto Anne al verme tan sorprendida.

-Me encanto.-

-Es toda tuya, esta será tu habitación.-

-Muchas gracias Anne.- Los agradecimientos no solo eran por la habitación, sino por todo...

-No tienes de que preocuparte. Andrew y yo estamos muy a gusto con ustedes.-

-Pero... Yo soy... un peligro para ustedes...- Aún no podía entender porque alguien con uso de razón quisiera ayudar a alguien como yo... Solo están arriesgando sus vidas...

-Miranda, si a ti te llegara a pasar algo, cosa que no puede suceder, todos estaríamos perdidos, además, eres, o eras, o serás mi amiga. No puedo dejar que nada te pase.- Sus palabras sonaban realmente sinceras, creí en ella, además, ¿por qué dudar de Anne?...

-¡Hey chicas!.- Nos llamó Eric.

-¿Qué quieres rulitos?.-

-¿Rulitos?.- Dije en tono burlesco.

-Si..- Dijo Eric. -Sabes que detesto que me llamen así.-

-Como tu digas, ''rulitos''.- Anne y yo nos reímos de la expresión de Eric al escuchar eso otra vez.

-Solo les venía a avisar que Andrew, Cristina y yo iremos a jugar basquetbol, ¿vienen?.-

-Pues...-

-¡Claro que si!.-

-Yo no creo... Soy una pésima jugadora de basquetbol.-

-No lo creo.-

-Es cierto, mejor me quedo acá.-

-No, tu vendrás con nosotros.- No me dejaron decir ni una palabra más, Eric me tomo en brazos y me llevó a la cancha... ¿Cancha? ¿Qué hace una cancha de basquetbol aquí?.

-Son algunos lujos que se dan estos chicos.- Me respondió Eric.

-Emmm... ¿Me podrías bajar?.- Aún me cargaba en su espalda.

-Tal vez.-

-Bájala ya.- Dijo Cristina, entrando. Eric me bajo.

-Idiota.- Murmure.

-Te oí.- Dijo él.

-Genial.-

Fuimos a la cancha de basquetbol. Anne, Cristina y yo formamos un equipo, Eric y Andrew otro. Según Cristina, el hecho de que Eric fuera un lector de mentes, solo hacía que ellos tuvieran ventaja.

De repente, una pareja de... demonios aparecieron...

-Anne, Cristina, ¡¡llévense a Miranda de aquí!!.-

-Aquí estás, maldito traidor.-

-Eric, ¡NOOOOO!.-

Hola (= Espero qe les guste el cap. Costo un poqo acerlo xqe no tenia muxa inspiracion pero ya lo termine :D

Bye!! Cuidense