***CAPITULO ANTERIOR***
-¡Idiota!.- Escuche a Cristina darle una bofetada a Eric.
-¡¡Hasta aquí Cristina Farro!!.- Eric se para y toma a Cristina del cuello, fue ahí donde ella saca una navaja de plata que entierra en el abdomen de él.
***CAPITULO DE HOY***
-¡¡Aaaaaaaaaaaaaa!!.- Eric grita de una forma desgarradora. Tengo que detener esto ¡¡Cristina no puede matar a Eric!!
-¡¡DETENTE!!.- Chillé y me puse entre Cristina y Eric, si le iba a clavar la navaja en el pecho, primero tendría que pasar por sobre mi.
-¿Qué te ocurre niña?.- Dijo ella tirando la navaja al suelo.
-¿Qué que me pasa? ¡¡Ibas a matarlo!!.-
-Él es un monstruo.-
-¡¡Él no merece morir!!.-
-¿Por qué?.- No sé que contestar...
-Contesta Miranda.-
-¡Porque él me perdono la vida!.- Al fin encuentro una buena excusa para darle a Cristina, realmente aún no entiendo por quiero que Eric no muera.
-Gra...ci...as... Mi...randa...- Dijo Eric con gran dificultad.
-De nada.-
-¡¡Cierra tu bocota sanguijuela!! O juro que te mato y ni la princesa te salvará.-
-¡¡Calmate Cristina!!.-
...
-Buenos días Miranda.- Es Eric el que me saluda.
-Hola Eric... Emmm... ¿Dónde... estamos?.-
-En mi humilde hogar.- Dijo Cristina entrando a la habitación.
-¿A qué le llamas humilde?.- Estoy en la habitación más lujosa que he visto en mi vida. Todo esta perfectamente ordenado, hay una armoniosa decoración, parece la habitación de una princesa.
-Tu casa es hermosa.- Dijo Eric.
-Gracias sangui... Eric.-
-Hey chicos, ¿qué sucedió? Lo último que recuerdo es que tu le enterraste una navaja en el abdomen a Eric... Y yo intervine para que no lo dañaras.-
-Luego de eso tu te quedaste dormida, o mejor dicho, Cristina te hizo dormir.-
-Ese es mi talento especial, hacer dormir a la gente.-
-Aaaaa...- Dije asintiendo con la cabeza.
-Bueno, yo iré a preparar el desayuno.- Dijo Cristina dirigiéndose a la salida. -¿Qué quieres comer Miranda?.-
-Una taza de café con leche y tostadas con mermelada.- Ese siempre ha sido mi desayuno favorito, mamá me lo preparaba asi desde que yo era pequeña.
-Ok.- Eric y yo quedamos solos en la habitación.
-¿Qué paso después que me dormí?.- Estoy segura de que las cosas no quedaron así como así.
-Cristina se tuvo que conformar con verme herido, porque no me puede matar, sabe que soy su salvación.- Dijo mirándome directo a los ojos.
-¿Y luego?.-
-Luego... vinimos acá.-
-¿Solo eso?.-
-Eres muy curiosa, ¿lo sabías?.- Siempre me lo han dicho, no es ninguna novedad.
-Jajajajajaja.-
-¿Qué?.-
-Es que tus pensamientos se siguen oyendo como gritos.-
-No me hace gracia.-
-A mi si.-
-Espera a que sepa usar mis poderes.-
-Que miedo.- Dijo sarcásticamente.
-Idiota.-
-No eres la primera que lo dice.-
-¡¡Te detesto Eric Williams!!.- Él tiene ventaja por sobre mi, puede leer mi mente, yo ni siquiera puedo hacer que se moleste.
-¡Qué linda eres!.- Dijo él repentinamente. Mis mejillas se enrojecieron. Nunca me habían dicho eso. Nuestras miradas se unieron por un largo momento. De repente Eric se fue acercando a mi rostro lentamente hasta que pude sentir su frio aliento, nuestros labios estaban a milímetros de juntarse, pero...
-¡¡Miranda!! ¡¡Eric!!.- En ese instante entro Cristina con una bandeja donde estaba mi desayuno. Eric y yo nos separamos rápidamente. -Sabía que no podía confiar en ti, estúpido chupasangres.-.
-Cristina, no fue su culpa.- Aunque se que si lo fue, no quiero que vuelvan a discutir otra vez.
-Pero...-
-Yo me acerqué a él, fue un impulso, no volverá a pasar.-
-¿Es verdad eso vampiro?.- Si Eric contesta que no, solo habrán problemas.
-Si, es verdad.-
-Bueno, toma tu desayuno.- Dijo saliendo otra vez de la habitación.
-¿Por qué lo hiciste?.-
-Tu lo sabes, puedes leer mentes, ¿no?.-
-¿Solo para no provocar más problemas?.-
-Por supuesto, ¿por qué más querría yo encubrirte?.-
-Porque te preocupas de mi.-
-JaJa.- Dije sarcásticamente.
-Entonces ¿¿por qué lamentaste tanto que Cristina nos haya interrumpido??.-
-Eso es lo que crees, nunca lamente nada, al contrario, me alegro que haya llegado. Jamás besaría a un... vampiro.- Salí de la habitación dejando la bandeja encima de la cama. No quería que Eric estuviera cerca mío de ninguna forma, a pesar que aún puede leer mi mente, al menos no puedo escuchar sus opiniones al respecto. Fui a la terraza y me senté en un sillón de mimbre.
-No puedes huir de tu destino.- Dijo Cristina, me asuste al verla.
-¿Por qué lo dices?.-
-Por Eric. La historia se repite exactamente... como ocurrió hace ciento cincuenta años.-
-¿De qué hablas?.-
-¿Recuerdas tus pesadillas? Eric es el chico ensangrentado que sale en ella.-
-Si lo sé.-
-Y también sabes que tu pesadilla fue lo que tu bisabuela vivió antes de volver a tu mundo.-
-Si, también lo sé.- Aún no entiendo que es lo que pretende Cristina con esto.
-Pues todo comenzó así. Tu bisabuela conoció a Eric y se enamoro de él, yo era su guardiana y él era el que se debía encargar de que muriera. Pero no lo hizo porque se enamoro de ella. Por eso en tu pesadilla ves a la chica corriendo por el bosque, por eso lo ves a él ensangrentado, porque hubo una lucha para capturarla, lucha en la cual Eric la defendió, lucha donde él murió...-
-¿Qué?.-
-En ese tiempo Eric era un simple mortal, un mortal con poderes extraordinarios, los cuales eran los que el imperio de la oscuridad necesitaba para dar muerte a tu bisabuela.-
-Pero ¿Cómo es que se convirtió e vampiro?.-
-Bueno, cuando la batalla estaba llegando a su termino, él le rogó a tu bisabuela que siguiera corriendo, hasta que encontrara la salida al mundo real, ella con todo el dolor de su corazón lo hizo, en ese instante Eric murió...-
-...Pero mis poderes eran demasiado valiosos para el imperio del mal como para perderlos, por eso me convirtieron en un monstruo nocturno, bebedor de vidas, maldita sanguijuelas, estúpido chupasangres... En un vampiro.- Dijo Eric acercándose a mi.
-¿Y cómo vivió mi bisabuela? o ¿por qué yo tenía que ser la elegida y no mi abuela o mi madre?.- Comencé con el interrogatorio otra vez.
-Anne, (el nombre de ella) corrió lo más rápido que pudo. Cuando ya estaba a punto de llegar a la salida, un demonio la tomo, pero en ese momento llegó Cristina...-
-Lo golpeé con fuerza y lo tire contra unas rocas, Anne siguió corriendo sin mirar atrás...-
-Hasta que volvió a su mundo, volvió a ser una simple mortal, o al menos, a vivir como tal.-
-Ella olvidó todo esto... Antes de que cruzará la salida le borré la memoria, le cambié sus recuerdos por unos más realistas...-
-Lo que ella sabía cuando volvió a su mundo, era que...-
-Sus padres la habían abandonado, que vivía en una casa con una amiga... Así paso toda su vida creyendo eso. Luego conoció a mi bisabuelo, se casó y tuvo hijos.- Esa historia la ha contado siempre mi abuela, dice que su madre tuvo una vida difícil y la pone como ejemplo.
-Si, eso.-
-Pero todavía no responden mi segunda pregunta ¿Por qué yo?.-
-Aún no está claro.-
-Al principio se creía que sería tu madre, por ser la hija del medio.-
-Pero no fue ella... Fuiste tu.-
-Ok...- Era lo único que se me vino a la cabeza, no supe que responder, Cristina y Eric me han contado la historia de la cual solo sé una parte, la que aparece en mis pesadillas... Este es mi destino... Uno que yo no busqué. Uno que yo no quería... Estoy prisionera de mi destino, no puedo escapar... Todo esta escrito, solo me queda esperar a que todo suceda...
...
Ya es de noche, durante la tarde fuimos a comprar algo de ropa para Eric y yo, ninguno de los dos teníamos algo decente para vestir. Yo he estado usando ropa de Cristina, su ropa es linda, pero no de mi gusto...
-¡MIRANDA! ¡CRISTINA!.- Eric grito llamándonos.
-¿Qué quieres vampiro?.- Pregunto Cristina.
-Tenemos que irnos inmediatamente de aquí.-
-¿Por qué?.-
-El ejercito de la oscuridad ya descubrió que los traicioné, viene por nosotros. Si no nos vamos ahora, todos quedaremos reducidos a cenizas.-
-¿QUÉ?.- Gritamos Cristina y yo al mismo tiempo.
- Ya vienen por nosotros.-
-¡¡Yo no huiré!!.-
-¡¡Cristina!! Usa un poco de sentido común, si hace cinto cincuenta años sobrevivimos fue solamente por suerte, pero está vez no. El ejercito es mil veces más fuerte y poderoso. Ni de milagro saldríamos vivos... Bueno, quizás Miranda viva, pero no pienso correr el riego.-
-¿Dón...de...e...iremos...?.- Tenía tanto miedo que ni siquiera las palabras lograban salir de mi boca claramente.
-Tengo unos amigos en Canadá. Ellos son muy poderosos, llevan viviendo como vampiros el doble que yo.-
-Entonces... Iremos a Canadá.-
Olaa!! qe les parece el cap.?? Ojala qe les guste!!
ame el cap. porfa siguellaaaaa pronto :)
ResponderEliminarAAAAAAA!! Iremos a canada! wow ! y eric los traicionó Que tierno ! muy tierno ! pero que malvados esos mounstrous de la oscuridad ¬¬ me cayeron mal ¬¬les pegaré jajajaja Sube pronto
ResponderEliminarSee you
Kiirha-Jonasmanía