Capitulo 15: Laberinto

Las nubes negras impedían el paso de la tenue luz de luna y el brillo de las estrellas... Por primera vez me sentía triste por esto, quizás no vuelva a ver el cielo despejado nuevamente.

 El medallón habría el portal hacía el lado oscuro. Ya esta todo planeado, Eric, Cristina y yo iremos al castillo Oscuro, buscaremos a Andrew y el resto lo improvisaremos, no es mucho lo que podemos hacer sin saber a lo que nos enfrentamos ahora. Si logramos regresar, tendremos muchas respuestas necesarias, y sino, al menos sabré que no morí como una cobarde.

-Te iras solo para obtener respuestas.-

-Francisco, lo lamento, pero es algo que debo hacer.-

-¿Recuerdas lo que prometiste?, no lo estas cumpliendo.-

-Es la única solución que tengo.-

-Solo vete de una vez, encuentra tus respuestas y olvídate de la manada, claro, hasta que tengas otro problema y necesites un lugar donde refugiarte.- No necesitaba escuchar su mente para saber lo que pensaba, estaba decepcionado de mi, esperaba que me quedara aquí... Hasta ahora yo soy la única persona que es capaz de entenderlo a la perfección, ni siquiera Destiny ha logrado comprender su simple e inocente forma de ver el mundo, muy similar a la mía.

-Sabes que no es así, jamás podría olvidar la manada y mucho menos a ti... ¡Te quiero mucho niño!, ¿es necesario qué lo diga? eres mi otra mitad, la alegría y la luz de mi perpetua oscuridad.- Si decía aquello, era porque de verdad lo sentía, porque de repente Francisco se convirtió en eso, sé que no puedo vivir sin su risa infantil ni su mirada que refleja nobleza, prácticamente somos uno... Al fin puedo sentir que tenemos un solo corazón palpitando en dos cuerpos.

-Puedes pensarlo mil veces, pero no significa que sea así.- Sus palabras me hacían daño pero no me detendría por eso. Al final de cuentas, es por el bien de todos.

-Lamento que pienses de esa forma.- Salí corriendo de la cabaña, debíamos llegar pronto al reino oscuro y... No quería seguir escuchando las palabras de Francisco. Perfectamente sabía que no era lo que realmente creía, pero aún así me lastimaba.

-¡Hasta que llegas!.-

-Siento la demora.- Me excuse con Cristina.

-Ok.-

-Supongo que ya es hora de irnos.- Musito Eric.

Tomé el medallón con delicadeza y lo abrí. Una resplandeciente luz blanca azulada inundo toda la habitación y se centró en la pared.

-Tienes que entrar.- Me indicó Cristina. Estaba dudosa, ¿y qué tal si esto no nos conducía a ninguna parte? Eric tomó mi mano y me hizo un ademán para que lo siguiera.

-Nada ocurrirá preciosa.- Ambos nos adentramos en el portal... No me esperaba un bosque oscuro y aterrador, pero tampoco esto.

-¿Dónde rayos estamos?.- Solo visualizaba una enorme pradera verde brillante y un fabuloso cielo azul claro.

-En la línea que divide el reino de la oscuridad de tu reino.- El que Eric dijera ''tu reino'', me hizo sentir incomoda y molesta. Aquel no es mi reino, cada día que pasa me siento más ajena a eso.

-¡Hey chicos! no se olviden de mi.-

Eric y yo rodamos los ojos. -Tu maldito olor apetitoso es imposible de olvidar Cristina.- Agregó Eric sarcásticamente.

-Ok, ok.- Gruño la no tan dulce ángel guardián.

-Solo síganme.- Por lo visto Cristina tampoco había estado aquí, miraba confusa por todos lados tratando de hallar algún camino que nos llevara al reino de Laurent.

-¿Has estado aquí antes?.- Pregunté a Eric.

-No exactamente.-

De un momento a otro, mi pecho se desgarraba horriblemente, pero no físicamente, era algo más allá, rabia, tristeza, decepción, impotencia y desengaño... Entendí que Francisco ya se había enterado de la verdad, de que él no es hijo de quienes cree son sus padres... Comencé a llorar incontrolablemente, sintiéndome desdichada y completamente sola en un mundo desconocido, donde no pertenecía a ningún lado, de una forma u otra, eso me identificaba, por lo que el maldito sentimiento se hizo más potente.

-¿Qué ocurre?.-

-Esta teniendo una reacción en común con Francisco, al parecer se entero de algo muy difícil.- Respondió Eric por mi al leer mi mente.

-¿Algo muy difícil? ¡Acaba de descubrir que las personas con las que ha vivido desde que nació no son su familia! eso no es difícil, ¡¡es horrible!!-

-Tienes que estar tranquila, si te pones mal tu también, Francisco sufrirá el doble, ¿entiendes? solo respira y piensa en que no estas sola,  ni tu ni el chico, se tienen mutuamente, Francisco tiene a la manada, tu nos tienes a nosotros, jamás estarán desamparados... Ambos pertenecen a este mundo, por muy ilógico que pueda parecer ahora.- Dijo Eric seriamente. Al fin logré serenarme y pude controlar mis emociones.

Caminamos por horas hasta que anocheció, seguimos el sendero que indicaba el libro de Andrew, pero terminamos atrapados en un laberinto sin salida. Cada pasadizo no es sino únicamente otro camino que no lleva a ninguna dirección. La desesperación se sentía en el ambiente, Eric no escuchaba más mentes que la de Cristina y la mía.

-No podemos seguir ahora, ya es de noche y solo lograremos perdernos más de lo que estamos.- Comenté agotada.

-Miranda tiene razón, paremos aquí, debemos descansar.-

-Las entiendo chicas, pero no podemos detenernos, si los soldados de la oscuridad nos encuentran primero estaremos en serios problemas.- Bajo la rígida expresión del rostro de Eric, se oculta perfectamente el pánico que todos sentimos ahora. ¿Cómo podemos estar seguros de que saldremos con vida de aquí? Me abracé a Cristina y a Eric, buscando algo de apoyo, tal vez el aroma de mi ángel sea completamente enloquecedor, pero eso ya no tiene importancia, solo importa lograr salir de este laberinto. 
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Muxas graxias a Mixxi x el premioo!! Lamento decirte qe no he leido tu nove ultimamente x lo qe no puedo responder las preguntas qe hiciste en tu pagina :S 
http://miunicoyverdaderoamor-nickytu.blogspot.com/ 

Capitulo 14: Necesito respuestas

-¿¡Me estas diciendo qué probablemente seas una vampira/princesa/ loba!?- Dijo incrédulo Eric después de que les todo lo que había pasado en estos últimos días.

-Si. De alguna forma, mantengo una conexión psíquica con el menor de la manada, es inmune a mis poderes y todavía puedo sentir lo mismo que él siente.-

Cristina estaba sentada cerca de la puerta principal, escuchaba atentamente la conversación y cuando la entendió por completo, decidió participar. -Miranda, ¿estas consiente qué los lobos se verán nuevamente involucrados en esto?-

-No lo harán, no tienen porque.-

-Solo basta que un chico de la manada este relacionado en nuestra pelea para que toda la manda lo haga, sobre todo si es el hermano menor de la loba Alfa.-

-Debo mantenerlo alejado lo más posible entonces.-

-¿Cómo?, actúa exactamente como tu, es imposible controlar a alguien tan obstando.- Bufó Eric.

-No lo sé... ¡Maldición!, es imposible mantener alejado a Francisco de nuestro mundo... Si yo llegara a morir... Él también lo haría, nuestras vidas dependen de mí.-

-Lo importante es que al chico no le pase nada.- Agregó Kate que se había mantenido en silencio hasta ahora. -Ambos pudieron morir ayer con el ataque del vampiro de la guardia Oscura. Si la loba Alfa y tú no llegan a tiempo...- No había pensado en eso, solo había considerado el hecho de que yo moriría, pero nunca pensé que Francisco corriera peligro.

-Esto es más difícil ahora que sus vidas dejaron de ser individuales.-

-Lo sé, Destiny me explico algunas cosas sobre esto...-

-¿Quién es Destiny?- Preguntó Cristina.

-La Alfa de la manada, la hermana mayor de Francisco... Ella mantenía el mismo lazo con Johan...- Confesé con algo de miedo a la reacción que provocaría ese nombre después de tanto tiempo. Eric rodo los ojos un poco molesto por el recuerdo de mi amigo. -Un solo corazón viviendo en dos cuerpos, así de fuerte puede llegar a ser un lazo así, pero nosotros aún somos dos corazones en dos cuerpos...-

-Bueno, el niño solo es un licántropo, no es inmortal, el hecho de que su lazo no sea fuerte es una gran ventaja, si le pasa algo a él, tu no morirás necesariamente.- No podía creer que Kate viera eso como una buena opción.

-¿¡Qué!?, ¡ustedes nunca entenderían nada!.- Grité frustrada. -Francisco no es un simple licántropo, ¡es una persona!, tiene sentimientos, es inteligente, no es un animal sobrenatural... ¡Pero claro!, ustedes solo ven en él a un lobo, a su enemigo natural ya que no son capaces de ver más allá de eso.- Estaba muy decepcionada de que vieran así la situación, traté de controlar mi rabia cerrando mis puños con mucha fuerza, enterrando mis uñas en las palmas de mis manos, haciendo que estas sangraran... -Debí suponer que actuarían de esa forma.- Corrí a la puerta, pero Eric se interpuso.

-No puedes irte ahora, Laurent ya debe haber enviado a otros soldados en tu búsqueda.-

-Eso espero, sería muy decepcionante que no lo hiciera.- Comente desafiante.

-Ya no será uno solo y no será tan facil que salgas victoriosa.- Insistió Eric.

-Genial.-

-¡Deja de comportarte como una niñita caprichosa!-

-Lo siento Cristina, pero por si no lo recuerdas, yo no termine de ser adolecente, nunca pude comportarme como una maldita caprichosa, algún día debía hacerlo.- Esquivé a Eric y salí de la enorme casa, sabía que alguien me seguía, podía oír su ligero pero firme paso detrás de mí.

-Puedes devolverte a casa. No necesito guardaespaldas.-

-No dejaré que corras peligro innecesario por un vano ataque de inmadurez repentino, ¿me escuchaste Miranda?-

-Si llegó al territorio de los lobos con una ángel, ¿crees que no se molestaran?, ya es suficiente con una manada de adolecentes mitad lobos y una completamente extraña vampira/princesa/posiblemente loba. Ya hay muchos fenómenos en el lado sur de París.-

-Bueno, hasta donde yo sabía, los ángeles guardianes no tenemos prohibición de entrar a ningún lugar, y tampoco sabía que tu me consideras un fenómeno, tomando en cuenta que tu eres un ser no clasificado aún.- Dijo un poco en broma.

-Cristina, debo estar sola, además, no querrás convertirte en mi almuerzo.-

-Eso ya dejo de ser gracioso.-

-Me llamaste ser no clasificado.-

-¡Ya supéralo!-

-No lo haré chica fenómeno.-

Llegar al sur de París nos tomo poco tiempo gracias a nuestra velocidad. Escuchamos aullidos al entrar al bosque y pronto divisamos a dos lobos peleando.

-¡¡Hey chicos deténganse!! Esa no es forma de arreglar un problema.- Les grite asustada, los chicos de la manada se pusieron a reír y Blair se burlo en mi cara de mi reacción... Tiene suerte de ser solo una niña porque ganas de ponerla en su lugar no me faltaban.

-No pasa nada chupasangres, solo están entrenando... ¿Quién es ella?- Preguntó mientras inspeccionaba a Cristina de pies a cabeza como una maquina de rayos x.

-Es un ángel guardián, protege a los miembros de la familia real.- Dije con algo de orgullo, al fin no tendría excusa para dudar de que yo soy princesa.

Blair rodo los ojos. -Pues para ser un ángel, es bastante común, he visto parisinas muchísimo más lindas que ella.-

-¿Disculpa?, tu no eres precisamente una reina de belleza, cariño.- Bufó ofendida mi amiga.  -Mira esto.- Cristina hizo  una pequeña llama rojiza en sus manos, jugaba con ella como si fuera una simple esfera, pasándosela de una mano a otra, la apago con sus palmas para luego convertirla en gotas de agua, todos estábamos mirándola sorprendidos, yo no tenía idea de que ella fuera capaz de eso. -¿Aún dudas de mí?- Sonrió triunfal.

La niña dio un suspiro y hablo al fin. -Supongo que si eres algo, pero no necesariamente un ángel, puedes ser una muy extraña rareza.- Yo comencé a reír por lo bajo, no estaba muy lejos de lo que yo le había dicho de camino aquí. Cristina me fulmino con la mirada y no supo que responderle a Blair. Entonces Destiny llegó al círculo que se había formado alrededor de Cristina y Blair.

-¿Qué pasa aquí?- Quiso saber la Alfa.

-Nada Destiny.- Respondí yo.

-Tu amiga sanguijuela trajo otro fenómeno aquí.- Dijo Blair.

-Ya lo veo.- ¡Rayos!, olvide que Destiny aún estaba molesta conmigo por nuestro pequeño pleito.

-Soy Cristina Farro, guardiana de Miranda.-

-Miranda, Cristina vengan conmigo.- Pidió Destiny.

-Ok.-

-No la hagas enojar, no esta de buen humor.-

-Gracias... Espera un segundo, ¿dónde estas?-

-Ahora en tu cabeza.-

-Hablo enserio.-

-Muy lejos de Blair, con Andy y Dylan.-

-Genial.-

Pronto deje de escuchar a Francisco, nos alejamos mucho del prado...

-Miranda, debo decirte algo... Quizás sea la explicación del por qué tienes una conexión con mi... con Francisco.- Destiny estaba preocupada y... ¿angustiada?

-Solo dilo.-

-Es complicado... Deben prometer que no dirán nada.- Nos miro a Cristina y a mi, ambas se lo prometimos. -Mucho menos a Francisco.-

-Ya me estas preocupando.-

-Mi hermano y tú tienen más cosas en común de las que yo podía imaginar... Hable con él después de que te fuiste y lo comprobé. Bueno, eso me causo mucha curiosidad y recurrí a mi padre... Ni Blair ni yo tenemos cosas en común con Francisco, ni siquiera nos parecemos físicamente, somos completamente distintas a él...- Sospeche hacía donde se dirigía la conversación.

-Pero no es muy extraño, yo no me parecía en nada a mis hermanos,  además se que Blair es solo su media hermana y con lo desagradable que es, alegremente no se parece al chico.-

-Lo sé, pero Blair y yo tenemos un temperamento explosivo, poca paciencia y gran facilidad para pelear sin motivo.-

-¿Y qué?, eso no prueba que no sea su hermano.- Nadie había dicho eso, pero era lógico que eso era lo que Destiny pensaba.

-¡Si lo hace!, papá y mamá no son los verdaderos padres de Francisco.-

-¿¡Qué!? Pero si Francisco dijo...-

-Porque él no lo sabe, nadie lo sabía a excepción de papá y mamá. Cuando fui a preguntarle a papá, él me conto todo.-

-Pero, ¿cómo es posible que el muchacho se transforme en lobo?, es decir, no es hijo de ninguno de tus padres, ¿de dónde saco el gen para convertirse en lobo?- Intervino Cristina.

-No tengo idea y eso es lo que más me intriga y sobre todo preocupa. Se puede decir que yo soy la única de la familia que se ha transformado, ya que Blair sigue siendo una persona normal y no ha dado muestras de ir a convertirse algún día... Y Francisco... ¡¡Maldición!! no sé que ocurre con él.-

-Ok, ¿y de dónde salió Francisco entonces?- Estaba exasperada, si Destiny me metió a mi en este asunto, quizás Francisco y yo tengamos algo que nos una más allá de nuestra conexión...

-Lo abandonaron cuando era tan solo un bebé, o al menos eso fue lo que dijo papá.-

-Oh no...- Susurro Cristina, su rostro se torno pensativo y su mirada se perdió entre las nubes del cielo.

-¿Qué ocurre?- Dijimos al mismo tiempo.

-Debemos ir de inmediato con Andrew.- Respondió en voz baja aún pensativa.

-¿Qué? no podemos, este no es el mejor momento para ir a a Oscuridad.-

-¡¡Tenemos que ir!!- Gritó con nerviosismo. -Solo él nos puede dar respuestas.-

-Espera un segundo, ¿Andrew, por qué él? es un vampiro, ¿qué relación puede tener con los lobos?-

Cristina dio un suspiro -Más de la que te imaginas... Antes de que te encontraras con Johan, Andrew estuvo viniendo aquí para averiguar más cosas sobre su especie, buscar leyendas y viejas historias que pudieran tener relación contigo, y efectivamente si había una historia.- Mire confundida a ambas chicas, tenía entendido que si un vampiro cruzaba la línea del territorio de los lobos, estos tenían derecho de matar inmediatamente.

-Es cierto Miranda.- Confirmó Destiny al ver mi desconcierto.

-¿Qué historia?.-

-No creo que debas saberla.-

-¡Quiero saberla!.- Exigí.

-La única forma de que la escuches es rescatar a Andrew.-

-Entonces no tenemos otra opción.- Murmure sabiendo que rompería la promesa que le hice a Francisco. Sé que vale la pena, al menos eso espero.

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Hello Girls! solo hasta hoy subire caps seguidos! :$ 

Qiero agradecerle a todas las lectoras del blog pero en especial a Mixxi y RoCiio ya qe son las chicas mas fieles de la pagina :) o al menos eso es lo qe veo yo! Me alegro muxo de qe participen aqui :D 

Y... Bueno, aun estoy definiendo el personaje de Francisco, x lo q solo puedo adelantarles qe  sera muxo mas importante de lo qe imaginan :O

Good Luck Everybody!

Cuidense muxo!!

Atte: Conny Ferrer xD

Capitulo 13: Dos mundos distintos

-¿Por qué los vampiros y los hombres lobos no pueden llevarse bien?- Le pregunté a Destiny mientras me ayudaba a abrir la cremallera de una maleta.

-Somos enemigos naturales, como el león y la gacela, no veras a un león y a una gacela juntos fraternalmente, todo sigue su curso, el depredador y la presa... La vida y la muerte, de esa forma se logra equilibrar el ecosistema.- Sonrío para tratar de animarme un poco.

-Pero en este caso, ¿quién el león y quién la gacela?, es decir, en el ejemplo anterior, la gacela es débil, fácil de atrapar, pero los lobos poseen una fuerza brutal mientras que los vampiros poseen una enorme agilidad y también bastante fuerza, están en igualdad de condiciones, ¿no?-

Volvió a sonreír, pero de manera más fría. -Nosotros estamos aquí para acabar con los vampiros, para proteger a las personas, se podría decir que los lobos somos los depredadores. Aunque a veces nosotros terminamos como presas, somos inmunes a la mayoría de los poderes vampíricos, pero no a su ponzoña, una sola mordida y quedamos indefensos, volvemos a nuestra forma humana de inmediato. Desde ahí, ya no somos oponentes, solo seres débiles, presas fáciles de matar.-

-¿Y qué pasa conmigo?, se supone que debo sentir repulsión por ustedes ya que soy vampira, pero no siento nada, bueno, en realidad no, siento mucho aprecio por ustedes... Quizás eso podría validar la hipótesis de que soy en parte licántropo, pero entonces, ¿por qué no odio a los vampiros?-

-Porque tú tienes la mitad de los dos mundos, tú unes la Luz y la Oscuridad en una sola, y no me refiero precisamente al hecho de que seas princesa, vampira o loba, sino  a que tu corazón le pertenece a un vampiro, pero tú eres buena, solo quieres mantener a todos vivos sin que nadie salga herido.-

-Pero a veces yo salgo dañada.- Es la segunda vez que pongo a los lobos por sobre Eric, la primera casi nos mata a todos, ahora, no se que pueda pasar.

-Porque es imposible unir a dos mundos que luchan por separarse y  salir ilesa.-

-Supongo que tienes razón, pero eso no resuelve nada.-

-¿Por qué?-

-Porque los seres que más quiero no se soportan. Eric odia a los hombres lobo y ustedes a nosotros... Amo a Eric y con Francisco tengo una conexión especial, veo a mi hermanito en él.-

-También ves en él a Johan.-

-¿Qué?-

-Con Johan mantenía el mismo vínculo psíquico que tú mantienes con Francisco, podía ver lo mucho que se querían... Bueno, y Francisco me dijo que siempre recordabas a Johan al verlo.-

-Debí suponerlo.-Hubo un largo rato sin que dijéramos nada, entonces los ojitos marrón claro de Destiny comenzaron a humedecerse.

-El día en el que Johan murió, su dolor era mucho más allá de lo inimaginable, no solo físicamente, sino también emocionalmente. Estaba devastado por no saber nada de ti, tenía pánico de que algo te sucediera, entonces tu llegaste ahí, donde tenían a Johan encadenado y todo su mundo se paralizo, todo giraba en torno a ti otra vez... Entonces, algo más fuerte que un rayo lo traspaso... Nuestros corazones dejaron de latir súbitamente y nuestras respiraciones se detuvieron. Él murió y parte de mi se fue con él, éramos un solo ser en dos cuerpos, estuve a punto de morir, pero los chicos reaccionaron a tiempo y lograron hacerme volver a la vida.- Su sollozo era silencioso, pero en el había mucha tristeza.

-Tu, ¿lo querías?-

-No de la forma en la que te imaginas, Johan era mi amigo, mejor dicho hermano, lo quería tanto como a Francisco. Compartir nuestra mente nos convertía en uno.-

-Eso supongo.-

-Pero nosotros seguimos siendo dos seres en dos cuerpos diferentes, lo único que mantenemos en común son nuestros pensamientos.-

-Se supone que no debes meterte ahora en mi cabeza niño, deberías estar soñando con ''Amber''.-

-Primero: No es mi culpa que Destiny y tú me despierten con su conversación. Segundo: Amber es solo una amiga de la escuela.-

-Entonces no es verdad que ''sus maravillosos ojos azules iluminan tu día con solo verlos y su radiante rostro le daría envidia a la luna''.-

-No se lo digas a nadie, o diré ''lo mortalmente sexy que es el cuerpo de Andy'', el hermano de Jeremy-

-Eso se llama extorsión.-

-Si lo ves de esa forma, si, pero si lo vez como yo, es la forma en la que ambos cerramos la boca sin salir perjudicados.-

-¿Qué rayos te enseñan en la escuela?-

-Es lo que aprendo de mis amigos.-

-Son muy malas influencias.-

-En realidad yo soy el rebelde del grupo.-

-Mi hermano y tu se llevan muy bien, pero todavía no están listos para esto.- Destiny me sacó e la conversación que había en mi cabeza.

-¿A qué te refieres?-

-Tu eres una chica de 19 años, has pasado por cosas que nadie más podría entender, Francisco es un niño, tiene 13 apenas, recién esta aprendiendo a vivir y ya se vio  en un mundo que no le correspondía todavía, son completamente diferentes...-

-Tenemos más cosas en común de las que te imaginas Destiny.-

-¿Cómo qué?- Si le decía a Destiny en todo lo que su hermano y yo estábamos involucrados, me odiaría por exponer a su hermanito a peligros extremos solo por obstinación.

-Es difícil explicarlo con palabras, va más allá de gustos de música o cosas de ese estilo,  son sentimientos y reacciones, formas de ver el mundo en el que estamos metidos... ¡Podríamos hacer lo mismo sin siquiera ponernos de acuerdo!-

-No te exaltes Miranda, sé que debe ser complicado para ti estar más que vinculada con nosotros, pero también es difícil aceptar que la princesa que debería encargarse de mantener el orden en nuestro extraño mundo paralelo al humano pertenece en parte al lado oscuro.-

-¿Y qué pasa si no soy yo precisamente la que debe encargarse de eso?...-

-Entonces no sé que haces aquí.- Expreso firmemente la chica mirándome fríamente.

-Por lo que más quieras, ignora el comentario de mi hermana.-

-Es difícil hacerlo.-

-Debo ir a buscar respuestas.- Tomé mi cartera y salí de la pieza dejando sola a Destiny. Francisco me detuvo en el pasillo.

-Prometiste que no te irías.-

-Tu hermana no me ayuda a cumplir mi promesa.-

-Pero no es correcto romper un compromiso.-

-No puedo irme aún, no te preocupes... ¿No se supone que tu deberías estar en reposo?-

-Ya no tengo nada, sano rápido.-

-Ok. Iré al lado de los vampiros, tengo que ver como siguen las cosas allá, de seguro ese maldito asesino roba vidas paso por ahí.-

-Como quieras.-

Capitulo 12: Vidas unidas

No dormí mucho anoche. Le daba vueltas una y otra vez al asunto de mi relación psíquica con Francisco. ''Miranda, solo los lobos pueden tener conexión psíquica entre si, nadie más'',  dijo Destiny claramente, pero no puede ser que yo tenga una parte lobuna no desarrollada, me hubiera transformado en el mismo instante en el que conocí a Eric. He estado junto a un montón de vampiros si sentir nada... Soy una vampira, enemiga natural de los lobos pero aún así puedo relacionarme muy bien con ellos. ¿Por qué rayos cada vez que creo que las cosas no pueden estar peor aparece algo que las complica más?  

No, yo no tengo rasgos licántropos, solo es otra rareza de ser princesa, otra cosa extraña que entre miles de millones de habitantes de la Tierra me pasó a mi.

-Entre miles de millones de personas, yo soy un hombre lobo y no me molesta serlo.- Dijo mi amigo telepáticamente.

-No tenía la intención de ofenderte Francisco, pero me resulta muy difícil entender todo esto, ya no se quien soy.-

-Bueno, tienes razón.-

-Oye lobito, ¿ha habido alguna señal de vampiros cerca?-

-No por ahora, pero...-

-¿Pero qué?-

-Tu chupasangres esta merodeando los limites de nuestro territorio, tal vez esta tratando de entrar, pero desistió al ver a Jeremy y Destiny.-

-No lo atacaron, ¿verdad?-

-Lamento decir que no.-

-¿Cómo que lamentas?-

-Es un chupasangres que quiere entrar a nuestro territorio, no puede romper las reglas.-

-¡No exageres!-

-No lo hago.-

-¿Dónde estas ahora?-

-Estoy llegando a la casa.-

-Ve a hacer guardia otra vez, ¿quieres?- Anoche descubrimos que nuestra telepatía funcionaba solo estando a cierta distancia,  treinta metros aproximadamente, más allá de eso ya no podemos escuchar ni ver lo que ve o escucha el otro, aunque aún podemos tener sentimientos en común. De esa forma podíamos tener algo de intimidad sin incomodarnos.

-Ok, pero procura no demorarte mucho en vestirte, quiero comer algo humano, la carne cruda es asquerosa.-

-Ya vete.- Los escalofríos me recorrieron y supe que Francisco ya había cambiado de fase, pronto deje de ver el bosque... Me encerré en el baño y me di una ducha rápida, me puse un vestido floreado, un chaleco de hilo delgado y botas, todavía era otoño, pero el frío ya se estaba dejando sentir.

-¡¡Aaaah!!- Un dolor horrible me llenó, golpes fuertes, tal vez huesos rotos...

-¡¡Francisco!!-

-¿Qué pasa?- Preguntó Destiny muy asustada entrando al cuarto.

-Francisco esta en problemas.- No le di más explicaciones y salí corriendo como un rayo, tener super velocidad era de gran ayuda. Destiny entro  en fase y me siguió. El olor de Francisco estaba por todos lados, hasta que pude escucharlo.

-Miranda, un infeliz chupasangres ha entrado a nuestro territorio, debía detenerlo.-

-¡Mierda!, esto es mi culpa.- Corrí mucho más veloz con Destiny a mi lado. Otra ola de dolor me recorrió. Si me hubiera marchado antes, esto no habría pasado.

-No te puedes ir ahora.-

-No lo haré.-

-Promételo.-

-Lo prometo. Sabes tan bien como yo que no voy a fallar, no puedo irme, no tengo donde.-

-Con tu novio chupasangres.-

-No es una opción en este momento.-

Antes de que yo reaccionara, la enorme loba marrón dorado ya se había abalanzado encima del vampiro. Francisco estaba convertido en un indefenso lobo blanco y gris, su pelo estaba manchado con su sangre, las heridas que tenía eran profundas, podía saber con exactitud en donde se ubicaba cada una. Él simplemente se quedo tirado en la hierba, no podía mover ni un solo musculo.

-Te arrepentirás de esto.- Fueron las únicas palabras que dije antes de hacer retorcerse al vampiro producto de las intensas llamas que enviaba al interior de su pétreo cuerpo, solo viéndolo fijamente. Un terrible chillido salió de su garganta. Destiny se alejo, dándose cuenta que era yo la que provocaba esa reacción del infeliz demonio.

-Detente.- Balbuceó torpemente.

-¿Qué haces aquí?- Demandé al vampiro. -¡Responde de una maldita vez!-

-Shinoweth... Él me envió por ti.- Lo tomé del cuello, poniendo una expresión feroz y una amenazante sonrisa que dejaba ver mis relucientes colmillos.

-Dile  al cobarde hijo de perra que te envió aquí que esta vez no será tan fácil capturarme, ya no soy una débil niña... Y que esta vez, los lobos quedan fuera de la pelea, lo que lo incluye a él.- Mire al lobo ensangrentado. -¿Entendiste?- Él asintió con la cabeza, completamente aterrado.

Quería matarlo, romperle cada hueso de su cuerpo, pero de esa forma sería igual que ellos y no habría forma de que Laurent se de por enterado de mi recado.

-Vete de una maldita vez.- Bufé, el vampiro desapareció de mi vista en un segundo.

Me acerqué a Francisco y con mucho cuidado, tomé su enorme cabezota entre mis brazos.

-Debemos llevarte a la cabaña.- Destiny aulló fuerte y con eso llamó a los chicos de la manada...

(Horas después)

Me fui de cacería, hace días no probaba ni una gota de sangre. Lleve mi mochila donde metí el libro y el medallón dorado. Atrapé tres ciervos y me quede en el claro del bosque.

Comencé a leer el libro donde estaba en medallón con detenimiento, ahí debía haber alguna clave. Esa maldita rata endemoniada llego aquí de alguna forma, estuvo en el castillo Oscuro, de otra manera Laurent no podía darle ordenes. Yo pude ir con él, pero no podía dejar a Francisco asi. El medallón era mi última opción, quería encontrar más posibilidades, pero al parecer, es la única... Jugué con una hoja que cayó de un árbol en mi cabeza.

No puedo irme ahora, se lo prometí a Francisco. Al recordarlo, decidí volver a la cabaña y ver como seguía, ya que mi poder de curación no funciono en él.

-Te ves terrible.- Dije sin querer mientras entraba a su cuarto.

-¿Yo?, tu parecías poseída por el demonio en el bosque, tu rostro vampírico si que asusta.- A pesar de estar bromeando, Francisco hablaba enserio, de verdad le di miedo.

-Lo siento mucho, todo esto es mi culpa.-

-No es tu culpa que yo me lanzara en contra de esa roca sin saber pelear.-

-¿Qué?, maldición, ¡te pudo matar!, ¿no sabes lo fuerte que son ese tipo de vampiros?-

-Tú lo liquidaste en un segundo, y solo tienes una semana de vampira.-

-Porque tengo poderes, puedo hacerlo sentir el peor dolor de todo el mundo con solo desearlo, tu solo eres un niño. Ese desgraciado no es cualquier vampiro.- Claro que no lo era, tal como Katherine era en parte ángel, esos vampiros son en parte demonios, pero demonios puros, pertenecen a los descendientes de los vampiros originales.

-¡Woow! Estas metida en algo demasiado tenebroso y peligroso.-

-Lo sé, y tú no deberías involucrarte más. Lo que hiciste hoy fue suficiente.-

-Lamento informarte que no hay forma de que pueda mantenerme al margen, estamos unidos, lo que te pasé a ti, también me ocurrirá a mi.-

-No es justo, tú no tienes porque estar enredado en mi caótico mundo, enfrentar a vampiros como ese me corresponde solo a mí.-

-Las cosas no suelen ser justas.-

-Nuestras vidas dependen de mi, ¿te das cuenta de eso?, están unidas, si uno muere, el otro también lo hará.- Estaba al borde de la histeria, la vida de Francisco estaba en una cuerda floja, mi existencia no era segura ni eterna, siempre tendré que sortear ataques mortales, y no es completamente seguro que lo haga con éxito...

-Debes tranquilizarte, ninguno morirá, y si fuese así... Destiny sobrevivió aún estando enlazada con Johan.-

-Pero ambos eran lobos, yo soy una mescla extraña de tres especies distintas,   yo soy una excepción a la regla, ¿no te das cuenta?, pertenezco a la Oscuridad y a la Luz, no existe nada igual a mi...- El chico estaba asustado, pero trataba de esconder su miedo bajo una falsa seguridad.

-Entonces no tienes otra alternativa más que permitir que entre en tu mundo, solo de esa forma lograremos persistir.-

-Nunca.- Al fin entendía la actitud de Eric  al querer evitar que yo regresara al castillo Oscuro, en este momento quería mantener a Francisco lo más alejado posible de todo esto, incluso podría considerar pedirle a Destiny que lo encierre bajo llave, pero él es terco, se comporta como yo, un candado en una puerta no lo detendría... A mi no me detuvo.

-¿Solo tú puedes ser obstinada?-

-Si.-

-No te haré caso si tu estas en la misma situación que yo, no tienes mucha moral para pedirme que me mantenga al margen si tu no lo haces.-

-Tú no entiendes, debo salvar a mi amigo que sigue encerrado en algún lugar.-

-Y yo quiero salvarnos a los dos.-

Sin pensarlo, le di un abrazo a mi amigo. Estaba consiente que a pesar de todas sus palabras, él seguía siendo un niño, tan solo tenía 13 años , aún no estaba listo para enfrentar todo lo que se me viene encima inevitablemente, pero si él quería hacerlo, no lo detendría, sabía perfectamente que si le prohibía ayudarme, más querría hacerlo, yo hice eso...

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Muchas graxias x comentar! :D Como ahora volvi al colegio  no voy a poder subir caps seguido... D todas formas voy a intentar hacerlo dsde el cole en informatica :D

Capitulo 11: Lobos

Una mano apretó firmemente mi brazo para que me quedara quieta, sentía su calor traspasando mi piel de acero, su olor me provocó repulsión, pero no me arriesgué y me quede inmóvil.

-¿Qué haces aquí?- Preguntó la voz.

-Busco a los lobos. Necesito hablar con ellos.- Me soltó y se alejo de mi ágilmente.

-Los lobos no hablan con los chupasangres como tu.- Me volteé y vi a una chica de aspecto salvaje, con un enmarañado cabello negro azabache y una hermosa piel de color dorado.

-Soy Miranda Stewart.- Sus ojos se abrieron como platos al escuchar mi nombre. Me observo detenidamente y luego se puso en frente de mí.

-Sígueme.- Entramos a una cabaña en medio del bosque, adentro había una chica de unos 13 años y siete chicos de entre 14 y 19 años. Todos estaban riendo en el comedor.

-Destiny, ¡al fin llegas!- Exclamó el mayor de los chicos. -Morimos de hambre.-

-¡Cállate Jeremy!-Bufó la aludida.

-¿Quién es ella?-

-Es una vampira.- Repentinamente el ruido de la habitación se apagó, todos dirigieron miradas fugaces hacía mi y Destiny.

-¡Demonios!, ¿qué hace esa sanguijuela acá?-

-¡Debemos liquidarla!-

-¡Silencio! Ella no es cualquier vampira... Es Miranda, la princesa de la Luz, la protegida de Johan.- Las miradas fugaces se convirtieron en un completo análisis visual, me sentí cohibida.

-No es posible.- Comentó la niña. -Todos sabemos que la Princesa de la Luz no puede ser un ser oscuro, los vampiros son engendros malvados. Ella no es.-

-Pensé lo mismo en un principio, pero es la misma chica que describió Johan antes de... Bueno, ya saben a que me refiero.- Al parecer, yo no era la única que todavía sufría la muerte de Johan.

-Pero ya ha pasado más de un año.-

-Puedo decir que es la misma porque con Johan manteníamos un lazo psíquico, lo conocía tanto como él a mí. Sé que ella es la chica que llenaba su cabeza.- No comprendía absolutamente nada sobre sus lazos psíquicos, yo solo vine aquí para mantener alejado a Eric de mi y poder rescatar a Andrew, aunque quizás yo llegué hasta la manada de los Lobos por una razón...

El grupo se reunió en torno a Destiny para discutir la situación.

¿La chica vampira es una princesa?, woow, tan solo llevó seis meses en la manda y ya estoy conociendo esto. ¡Genial!.

-¡Mierda!-Grité yo y un chico de la manada. ¡Podía escuchar la mente de él!, ese no es un don que yo posea.

-¿Qué les pasa?-

-Pu...pu...puedo escuchar la mente... del niño...-Tartamudeé torpemente, apuntando a un niño de 15 años aproximadamente.

-¿Francisco?-

-Yo también puedo saber lo que ella piensa.- ¿¡Qué qué!?

-Esto es algo ilógico.- Destiny estaba tan o más confundida que yo. Y de cierta forma también sabía como se sentía el chico.

-Los vampiros y los hombres lobo no pueden tener conexiones psíquicas, ¡va en contra de toda regla!-

-También va en contra de la regla que la Princesa de la Luz sea un ser de la Oscuridad.- Masculló la pequeña niña.

-¿Qué esta pensando Francisco en este momento?- Me preguntó Jeremy.

Ok, la sangui... Miranda puede estar metida en mi cabeza, ¡maldición! ¿Qué rayos pasa?

-Esta tan confuso como yo con todo esto.- La facilidad con la que podía saber lo que pensaba Francisco era aterradora, yo no leo mentes, no puedo, no esta entre mis mucho dones, jamás pude hacerlo, ¡¡puedo controlar mentes, no leerlas!!

-Miranda, solo los lobos pueden tener conexión psíquica entre si, nadie más.- Destiny enfatizó las últimas palabras.

-Yo no tengo genes...- Mamá descendía de una princesa de la Luz, como yo, por lo que es imposible que yo tenga ADN licántropo.

Pero, ¿y tu padre?

-No lo creo.- Le respondí a Francisco en voz alta.

-¿Qué preguntó?-

-Si mi padre descendía de lobos.-

-Es una posibilidad.-

-No lo es, no puede ser, mi padre no era un...- Fenómeno, reprimí la palabra y bloqueé mi mente para no ofenderlos y que Francisco no me escuchara.

No somos fenómenos, y te sigo oyendo.

-¡Maldición! Eres inmune a mi bloqueo mental.- Dije frustrada. Cuando había logrado mantener un poco de privacidad en mi cabeza bloqueando mis pensamientos del poder de Eric, me encuentro con un niño que es capaz de traspasar mi barrera mental y saber lo que hay en mi cabeza.

-Los licántropos somos inmunes a gran parte de los poderes de las sanguijuelas.-

-Pero mis poderes no son vampíricos, podía bloquear mi mente aún siendo humana.-

-Entonces esto es mucho más complicado de lo que creía.-

-Blair, lleva a Miranda a la habitación que esta desocupada.-

-Pero ella no se puede quedar acá, ¡es una chupasangres!, ¿lo recuerdas?, nuestro enemigo natural.- La niña estaba mucho más que furiosa, por ningún motivo quería aceptarme.

-Blair  no es un dulce angelito como parece, tiene muy mal carácter.-

-¿Tu lo crees? No me quiere aquí-. Le pregunté a Francisco mentalmente. La comunicación telepática se estaba volviendo práctica.

-Es un poco posesiva, cree que somos sus cachorritos, nos quiere solo para ella.- Una pequeña carcajada salió de su boca. Blair le dedicó una de esas miradas que matarían a alguien instantáneamente si fuera posible.

-¿Crees qué es gracioso? Pues ya quiero ver cuando te convierta en alfombra de perro para su despacho.- La cabeza estuvo a punto de reventarme. Laurent dijo palabras similares el día que Johan murió. Reviví todo ese instante, una corriente de  dolor me recorrió el cuerpo y me estremecí. Francisco también lo hizo.

-Siento lo mismo que tu, no entiendo como pero se que me duele tanto como a ti.-

-Lo lamento mucho, no quería que proyectaras mis sentimientos.-

-Eso no se puede controlar. No te preocupes.-

-No creo que haya sido gracioso, pero lo que tu dijiste tampoco lo fue.- Dijo molesto el chico.

-Francisco, tu lleva a la chica a la habitación.- Ordenó Destiny.

-Como digas.-

Pasamos por un corredor y al fondo había un cuarto con la puerta abierta.

-Pasa y siéntete cómoda, esta habitación es toda tuya.- Era muy acogedora, tenía una cama, un velador y una lámpara. La ventana tenía vista a un pequeño riachuelo.

-Es muy linda.- Recordé mi habitación en casa de Anne, era cuatro veces más grande que esta, por lo que muchas veces me sentía sola.

-No tiene todos los lujos que poseías antes, pero creo que servirá.-

-¿Estas bromeando?, es genial.-

-Es muy extraño poder ver todo lo piensas y sentir lo que tu sientes.-

-Es verdad.-

-¿Cuántos años tienes?-

-Diecinueve.-

-Me refiero a tu edad real.-

-Diecinueve, tan solo llevo una semana desde mi transformación.-

-Estaba acostumbrado a escuchar sobre chupasangres legendarios de cientos y cientos de años, pero nunca había pensado en una vampira de solo una semana.-

-Y tu que edad tienes.-

-Trece.-

-Woow, solo eres un niño.-

-Pero mamá dice que parezco un adulto por como me comporto.-

-Yo creía que los hombres no maduraban hasta los 45.-

-Soy una rareza.-

-De  eso me doy cuenta... Espera, ¿tu ya eres un hombre lobo?-

-Si.-

-Eres muy pequeño.-

-El aumento de vampiros en el lado norte nos hace aumentar a nosotros, es algo directamente proporcional.-

-¿Destiny y Blair también son...?.-

-Destiny es la líder de la manada, es la loba Alfa, Blair solo espera algún día no muy lejano convertirse en loba también, pero realmente no es nada.- Comentó con cierto sarcasmo.

-Al parecer no quieres que ella se convierta.-

-Blair es una niña consentida, no entiende todo esto, no sabe lo difícil que es transformarse en lobo, lo mucho que cuesta dominarlo, solo quiere ser loba para dejar de sentirse excluida del grupo.-

-Solo quiere encajar.-

-Exacto.- Sin desearlo, tenía rabia, empuñe mis manos buscando controlar algo... Escalofríos recorrieron mi columna vertebral, como corrientes eléctricas. Entonces entendí que era Francisco el que trataba de controlarse.

-Lo siento Miranda, pero pensar en Blair me hace perder el control.-

-¿Por qué?-

-Pues Destiny y yo somos hermanos, hijos de los mismos padres. Blair es nuestra media hermana.-

-Pero Blair tiene...-

-Trece igual que yo. Es hija de mi padre, él engaño a mi madre y nadie lo sabía, hasta que Destiny se transformo en loba hace  dos años y luego yo un año después. Mi padre es el que lleva el gen en la familia, por lo que decidió hablar ya que sabía que Blair tarde o temprano se convertiría también. Quería prevenirla, y ahora no nos la podemos quitar de encima-

-Lo siento.- Verlo me hacía recordar a Johan, su mirada inocente estaba plasmada en el niño.

-No te preocupes.-

-Supongo que debe ser duro enterarse que tienes una media hermana que cree que eres un cachorrito y se comporta como Cruella De Vil.- Logré hacerlo reír. La risa que me hacía recordar bastante a mi querido amigo. Quizás el destino necesitaba que esto ocurriera, que encontrara a Francisco, el pequeño niño lobo.

Destino/Destiny. Que casualidad. Fue Destiny la que me trajo aquí y a la que le debía haberme salvado de estar encerrada en el sótano de la gran mansión por el resto de mi existencia.

-Así que estas escapando de casa.-

-Algo así. Mis amigos me quieren proteger...-

-Encerrándote en un sótano de por vida.-

-Exacto. Su idea de mantener a alguien a salvo es un poco distinta a la convencional.-

-¿Un poco distinta?,  tener a dos chupasangres de guardias no es nada normal.-

-Yo no soy normal. Soy una princesa vampira, y probablemente también sea parte loba. Soy la cosa más extraña que he pueda existir.-

-En eso tienes razón, eres un verdadero fenómeno, mucho más extraña que la mujer barbuda.-

-Muy buena forma de subir el ánimo.-

-Me tengo que ir.-

-¿El cachorro necesita comer?-

-¿Cómo lo sabes?-Bromeó

-Porque puedo sentir muchísima hambre, aunque no tenga, y tú estomago gruñe muy fuerte.-

-Es verdad.- Me dedico un tierna sonrisa y se despidió.

-Tengo que hacer guardia esta noche, con una vampira aquí, no sería extraño que otros chupasangres anden merodeando.-

-¿Chupasangres?, deja de decir eso lobito.-

-Ok, como quieras.- Francisco salió y se encontró con Blair en el corredor.

-No pelees con ella, podría ponerte bozal y dejarte encerrado en una perrera.-

-Gracias por decirlo.-

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I'm sorry x demorarme en subir pero no tenia internet antes y ahora subi dsde el colegio :/